Hace 1 semana
Archive for noviembre 2013
LA ESTÉTICA DE LA TELEVISIÓN: "CIUDADANO X"
By : El día del Espectador
HIMAR
R. AFONSO
Estamos
pasando por un momento de auge en la ficción televisiva, llegando a
equipararla al cine (“la
TV es el nuevo cine”). Tanto es así, que varios son los festivales
de televisión en los que, como el cine, se presentan los nuevos
trabajos de la temporada en pantallas gigantes. Estos nuevos eventos
tienen la ventaja del fenómeno fan, de colectivos ya vinculados al
pasado de esas nuevas temporadas de sus series favoritas.
![]() |
El inspector Burakov: la perseverancia de la investigación |
Más
allá de esto, un debate que ha generado estas nuevas tendencias es
el de plantear si realmente
la ficción televisiva puede ser cine.
Ocurre mucho con las películas antiguas que vemos en nuestras casas:
siempre será preferible verlas en una sala de visionados con una
buena pantalla, porque son productos
creados para
la gran pantalla. Pero ¿una
serie? Diría que las series, no es solo que no sean para la gran
pantalla, sino que cada vez se consumen en soportes más pequeños.
Es innegable que han mejorado su nivel estético y narrativo, con
grandes realizaciones, pero la pregunta que surge tras la
finalización de estos festivales es: ¿se
aguanta un capítulo de una serie en la gran pantalla?
Estamos
hablando de estética, no de narrativa. Yo no he visto una serie en
una sala de cine, por lo que no puedo opinar; pero este debate es muy
sugerente para reflexionar sobre la estética de la televisión y su
valor. Parece que es un buen momento para hablar de un telefilme que
produjo la HBO en 1994 y dirigió Chris Gerolmo: Ciudadano
X.
![]() |
El mal que se repite una y otra vez |
Diría
que esta obra refleja las
grandes virtudes que esconden las aparentes limitaciones estéticas y
narrativas de la televisión.
La obra nos cuenta la entonces reciente historia del asesino en serie
ruso Chikatilo (interpretado por el célebre y veterano Jeffrey
DeMunn), que se llevó a 52 víctimas antes de que las ineficaces
fuerzas del orden de la Unión Soviética lo capturase.
![]() |
El Dr. Bukhanovsky como desatascador |
Narrativa
y estéticamente, es una película que jamás habría podido llegar
al cine, y me atrevería a
decir que nunca fue esa su intención. Las presentaciones de los
personajes son muy metódicas y directas y las transiciones son
claramente televisivas.
Aún
así, no pierde el gusto por el dramatismo y la composición
sugerente en ocasiones, generando escenas realmente sobrecogedoras y
espeluznantes; y a la vez, una gran preocupación por plasmar el paso
del tiempo con la intención de acceder a la angustia y la impotencia
de carecer de medios para acabar con la amenaza.
Siendo
una clara crítica al sistema policial soviético y reflexionando
sobre lo que se podría haber evitado, resulta
interesante la manera en que esos dos grandes personajes
interpretados por Stephen Rea y Donald Sutherland aprenden a jugar en
el medio burocrático y a
mover sus fichas en los momentos oportunos para poder alcanzar el
objetivo que por momentos no parece ser el mismo que el de los altos
mandos, preocupados por no desestabilizar el orden ni perjudicar la
imagen de la nación, algo que en nada se diferencia de Occidente.
![]() |
Una pareja singular |
Volviendo
a la cuestión formal, parece bastante claro que la obra utiliza los
mecanismo televisivos para conseguir el mismo efecto emocional del
cine, permitiéndose incluso apariciones estelares como la del gran
Max Von Sydow, uno de tantos puntos de giro que renueva las fuerzas
para enfrentarse a ese asesino en serie que el público conoce y al
verdadero obstáculo personificado en el camarada Bondarchuk (Joss
Ackland), quien reformula el sentido del objetivo y el antagonista.
Un telefilme que muestra las
virtudes de la estética televisiva y sirve para posicionar el debate
sobre las posibilidades cinematográficas de la televisión;
porque la televisión tiene sus propios códigos de identidad.
8 PELÍCULAS DISNEY QUE MERECES REVISAR
By : El día del Espectador
Diego Real
Este viernes se estrena Frozen y en El día del espectador
estamos calentando motores. Antes de la misma, he querido realizar un repaso a
esos clásicos que quizás no lo son tanto porque han quedado eclipsados por
otras obras denominadas “mayores”. Echen a un lado a Pinocho, Blancanieves y Cenicienta
y haced hueco a Alice, Milo, Panchito, el tío Remus, Lewis, Oliver, Jim e Ichabood.
Alice Comedies
(Walt Disney, 1923-1927). Todos los genios tienen sus comienzos y Walt Disney
no empezó ni con Mickey ni con Oswald sino con los cortos de la niña Alice.
Estas obras de artesanía e ingenio, aunaban imagen real y animación mediante
unas historias a ratos crueles (los personajes no dudan en pegarse patadas y
hacerse todo tipo de perrerías), absurdas, divertidas y cuanto menos extrañas llevándonos a
una época en los que la animación más primitiva era casi más inteligente y
compleja que la actual. El origen de la saga se inspira en la obra de Carroll,
solo que esta vez Alice visita unos estudios de cine y termina en un mundo de
dibujos animados llamado Cartoonland. Entre las curiosidades de las Alice
Comedies está la aparición en 1935 de Pete Pata Palo, tres años antes que
Mickey, lo que le convierte en el personaje más duradero (si tenemos en cuenta
las apariciones de Oswald en los videojuegos Epic Mickey). Los cortos se pueden
ver en internet, como no, pero si sois fans recomiendo la adquisición
obligatoria del pack Disney Treasures titulado Rarities.
Los tres
caballeros (Norman Ferguson, 1944). Al igual que Sleepy
Hollow, película-paquete de la compañía. Aquí si que soy totalmente imparcial ya
que Los tres caballeros me marcó de pequeño por su locura y exotismo. Folklore
desatado, psicodelia y personajes carsimáticos que incluso eclipsan al genial
Pato Donald (doblado en español por su doblador original, Clarence Nash, por lo
que no se le entiende un carajo), y es que José Carioca y Pancho Pistolas
merecen ser rescatados de nuevo por Disney.
Canción del sur (Wilfred
Jackson, Harve Foster,
1946). Probablemente la más insólita de las producciones de la Disney por
diversos motivos. Pese a que fue todo un
éxito de taquilla, el tema central fue acusado de racista debido a que
los esclavos, lejos de criticar su condición, se mostraban tan felices y
cantarines que harían sonrojar al mismísimo Django tarantiniano. The New York
Times, incluso, creía que Disney pensaba
que estaba en contra de “lo que hizo Abe” en referencia a la abolición de la
esclavitud. Si se os han quedado los dientes largos y queréis ver Canción del Sur, tengo malas noticias:
la película está almacenada y nunca ha sido editada en VHS, DVD O Blu-Ray.
La leyenda de Sleepy Hollow
y el Señor Sapo (James Algar, Clyde Geromini, Jack Kinney,1949). Aunque la adaptación de El
viento en los sauces es simpática, prefiero centrarme en esa maravilla
siniestra que se marcaron con Sleepy Hollow antes que Burton. Pese a que pueda
parecer que Disney iba a adaptar el relato gótico en pos de la diversión, se
equivoca, el corto de mal rollo y no hay happy ending que valga. ¡El Jinete sin Cabeza da un miedo de la leche!
Oliver y su
pandilla (George Scribner, 1988) Film de la poco fructífera
aunque interesante etapa ochentera de Disney. Avanzada incluso en la
actualidad, el relato es una adaptación posmoderna, consumista y gatuna de
Oliver Twist que lleva el clásico de Charles Dickens a la actualidad y nada
menos que a Nueva York. Totalmente revisable y reivindicable, este relato lleno
de referencias a marcas (De Coca-Cola a Sony), iba a ser una secuela de Los
Rescatadores, otra cinta de animación que merece otro visionado. Recomiendo,
verla en versión original para disfrutar de las cuerdas vocales de Bette Midler
y Billy Joel.
Atlantis: el imperio perdido (Kirk
Wise, Gary
Trousdale, 2001). Se
ve que la Disney no tiene buena recepción cuando aúna animación y ciencia
ficción y el mejor ejemplo es Atlantis, película que poco a poco se va
revalorizando dentro del universo Disney. Una película quizás pensada para un
público minoritario pero exigente como es el amante de este género pero que es
todo un regalo a para ellos no solo por su historia cargada de referencias (a
Cameron le tuvo que encantar, tanto que Avatar
huele a plagio), es que además, en su versión original está doblada por Michael
J. Fox y Leonard Nimoy. Si detrás de Atlantis, estuviera Dreamworks, la
alabaríamos por imaginativa y oscura. Eso sí, huid de la secuela Atlantis 2: El regreso de Milo (Victor
Cook, Toby Shelton, Tad Stones, 2003). Y desde aquí imploro…¡ojalá una fase del
futuro Kingdom Hearts III esté ambientada en este mundo submarino!
El planeta del tesoro (Ron
Clements, John
Musker, 2002).
Adaptación fiel y, a la vez, totalmente original del clásico de Robert Louis
Stevenson considerada una obra menor de los directores de Aladdín y La Sirenita.
Pero yo la alabo por valiente, en una época en las nuevas tecnologías comenzaba
a hacerse cada vez más hueco en la infancia el acercar a este público una
novela de aventuras clásicas mediante futurismo steampunk es toda una
genialidad y un acto de valentía por el estudio que decidió apostar no por los
niños, sino por el público adolescente que un día se criaron con La Sirenita y Hércules. Visualmente poderosa y con una gran mezcla entre
animación tradicional y animación digital mejorando el efecto de lienzo
profundo ya visto en Tarzán. En
resumen, ¡la literatura clásica entendida
como un videojuego en la casa del ratón Mickey! Recomendable, una vez más, la
versión original ya que el protagonista está doblado por Joseph Gordon-Levitt.
Descubriendo a los Robinsons (Stephen J. Anderson, 2007). Reconozco que la vi a
desgana ya que creía que estaba ante otra película de dichosos niños inventores
(ahora en serio, ¿no puede existir una serie y/o película infantil en la que no
aparezca un puñetero niño que no sea un genio y que invente cuatro tontunas?).
Por fortuna, me equivoqué. Meet the
Robinsons es tremendamente loca y de un soberbio estilo futurista que la
hace estar a medio camino entre el cartoon clásico y la genial Futurama. La
historia es entretenimiento puro y pese a que parezca que pueda caer en la
lágrima fácil, no lo hace y el momento dramático es hasta conmovedor. Una
advertencia, no es recomendable ni para aquellos que sean puntilllosos con el
tema de las paradojas temporales ni para los amantes de los bombines. Junto con
Bolt y Enredados, pertenece a la etapa de animación digital Disney sin
Pixar que si no estuviera ese pestilente truño de Chicken Little, sería formidable. ¡SI HASTA SALE RAPHAEL!
Los Juegos de Hambre: En Llamas. Mejorando el legado de Gary Ross
By : El día del Espectador
Néstor Sánchez

Nada más empezar sabes que el
film va a ser mejor que el primero, los planos están más trabajado, hay
preciosos juegos de contraste de luces al comienzo de la película que rápidamente
te enganchara… la escenas donde recuerdan a los caídos en los anteriores
juegos, están muy bien conseguidas… en general tiene un buen comienzo.


En conclusión, es una película
entretenida, pero que por la falta de tensión puede que las dos horas se te
conviertan en tres. Esperemos que las siguientes consigan tener la fuerza
visual y emocional que el tercer libro te ofrece
"UNA FAMILIA DE TOKIO", HOMENAJE A OZU Y ESPIGA DE ORO
By : El día del Espectador
HIMAR
R. AFONSO
SEMINCI
ha sido embajada de diversos países para presentar sus películas en
un festival que cumple su edición número 58, una edición que nos
ha sorprendido con la Espiga de Oro para el remake La
familia de Tokio, de Yoji Yamada, quien ha querido
homenajear Cuentos de Tokio y dedicárselo a su maestro
Yasujiro Ozu.

Este
constante homenaje sirve de principal razón de ser de Una familia
de Tokio, cuya humildad y sincera veneración la hace entrañable;
eso y la excusa del 50 aniversario de la obra original. Sin embargo,
¿es posible encontrar algún otro motivo para realizarla? Porque, a
menudo, los remakes se aprovechan de los años para generar un nuevo
discurso con la misma historia acudiendo a los nuevos códigos y el
nuevo contexto.
En
este caso, pasa algo parecido, pues la historia se desarrolla en
el Tokio actual. Eso ya implica un entorno más hostil si cabe
para esos padres que vienen a visitar a sus hijos, en la medida en
que los pueblos de montaña no han ido a la par en el desarrollo
económico. Este Tokio posmoderno, tecnológico y superpoblado
modifica de alguna forma el contexto narrativo. Queda la pena de
que esta modificación no se perciba en el discurso en forma de
cambio, sino en una intensificación de las ideas de Cuentos de
Tokio, del cambio generacional, el paso del tiempo y el
sentimiento de insignificancia ante un mundo tan vasto, tan
diferente. Quizás tenga que ver con que, a pesar de los cincuenta
años de diferencia, la sociedad japonesa afincada en los pueblos no
ha avanzado tanto respecto al veloz desarrollo de la metrópolis; y
en este caso, sí cabe una nueva reflexión respecto a las
diferencias económicas entre el mundo urbano y el rural, tomando
como escenario una capital mundial referente en tecnología y nuevos
mercados, e interactuando con el discurso costumbrista de la obra
original.
![]() |
Kazuko e Isao, dos actores a la altura del proyecto |
Si
a esto añadimos unos actores francamente buenos, de dilatadas carreras, y una puesta en
escena bastante talentosa, parece que el director de El ocaso del
samurái ha realizado un muy buen ejercicio que, en última
instancia, muestra claros signos de respeto y admiración y un gusto
exquisito que hace olvidar, a todos los efectos, cualquier cuestión
sobre la necesidad de hacer o no un remake de Cuentos de Tokio.
CORTOMETRAJE: "Untold Tales" de Pedro Alonso Pablos
By : El día del Espectador
ÁLVARO TEJERO
Segunda entrega de la nueva sección del blog destinada a ofrecer un
espacio a los jóvenes realizadores y sus propuestas audiovisuales. Si
comenzamos hablando de un corto en concreto de reciente estreno , Espérame hasta que acabe el invierno, ahora lo hacemos del trabajo
de un animador casi autodidacta y que intenta abrirse paso entre las numerosas
propuestas que inundan la red.
Se trata de Pedro Alonso Pablos, realizador que mezcla en sus obras sus
dos pasiones: la animación y la música. Ofrece contenidos de creación propia
con la forma y espíritu de los cuentos clásicos intentando seguir esa máxima universal
de entretener enseñando.
Su principal esfuerzo va destinado a la serie Untold Tales, que tiene como objetivo
mostrar cuentos no contados ideados por el autor. Pero como cualquier cuento, su
intención es "efectuar un análisis del comportamiento humano del que se
pueda sacar una pequeña moraleja o aprendizaje vital" en palabras de su
autor.
Esta serie de cuentos cuenta hasta el momento con dos piezas: Riña en la cueva de los ladrones que podéis ver en el vídeo de abajo, y The Fallen Fairy,
disponible en la página web del animador . Van acompañadas de música clásica ya
que Pedro Alonso Pablos se considera un "gran fan de la música
orquestal"; y la idea es que Untold Tales
llegue a las diez entregas mezclando en ella la animación en 2D con la 3D.
Tanto esta serie como sus otros trabajos (la serie Twisted, basada en cuentos
occidentales, y los cortos de humor absurdo que son En la mente de una oveja) se caracterizan por una animación que
juega y se basa en la fuerza de las siluetas y las formas, por encima de unos
fondos que aun necesitan cierto trabajo. Parece que nos encontramos en un
antiguo teatro de marionetas en el que figuras arquetípicas de cuento se mueven
por fondos de sobra conocidos, mirándonos con esos ojos vacíos que centran
nuestra atención. Esto sobre todo se observa en la pieza favorita del que
escribe este artículo de todas las realizadas por Pedro Alonso Pablos, una
adaptación oscura de Alicia en el País de las Maravillas, dónde esos ojos
hipnóticos marcan el ritmo bien conseguido por la fusión de las imágenes y la
música.
A continuación podéis leer la entrevista realizada al animador, con
declaraciones sobre la situación del sector de la animación en España, los
métodos de producción necesarios o el papel de Internet en su desarrollo.
Si deseáis conocer más los contenidos del autor y juzgarlos con vuestros propios ojos podéis visitar su página
web: http://www.pedroalonsopablos.com/es/
¿Dónde has estudiado
animación?
"Después de pasar
fugazmente por la carrera de Arquitectura en la UPM de Madrid y también por
Periodismo de la UCM (sin terminar ninguna de las dos lamentablemente), aprendí
a usar programas de ordenador de 3D y de tratamiento de vectores. Luego he
hecho cursos sueltos y llevo dedicándome al diseño web mucho tiempo por lo que
domino las herramientas para hacer animaciones y juegos interactivos. En general, puedo considerarme autodidacta,
si descartamos el pequeño aprendizaje de técnicas 3D orientadas a la
arquitectura. Se da la
circunstancia de que también inicié un aprendizaje musical a nivel hobby que
después me ha servido para dar rienda suelta a mi imaginación y poder crear, al
cabo de algunos años, mis propias piezas musicales, que incluyo en mis obras.
"
Métodos de producción
"Hoy en día la animación es algo muy
asequible. El programa "Blender",
que se usa para hacer 3D, es totalmente gratuito y pertenece a una fundación
sin ánimo de lucro (por eso lo menciono directamente), y es el claro ejemplo de
que con un ordenador y mucha voluntad podemos plantearnos hacer casi lo que
queramos; pero también hay otros programas musicales, como el Garage Band de
Apple, que vienen gratuitamente incluidos en la compra de un ordenador de su
marca, y otros muy conocidos de animación 2D y edición de imágenes que se
pueden probar y adquirir por "un puñado de dólares" al mes,
utilizando un símil cinematográfico. Todo muy asequible, la verdad."
¿Qué se necesita para
llegar a ser animador?
"Esta pregunta me
gusta mucho ya que hay mucha gente que
se piensa que para hacer un corto o animación hace falta un gran presupuesto y
contactos en el mundo del cine. Nada más lejos de la realidad. Para hacer
una pieza lo que necesitas es un ordenador (y cámara en caso de que sea
"live action") y una conexión a internet. La gente es reacia a poner
sus cosas en internet pero actualmente hay páginas que están deseando que subas
contenido a ellas, y así podrás ir aprendiendo sobre qué es lo que gusta al
público y qué no. Luego se puede ir escalando y pasar de Youtube a otras
plataformas. Pero no nos engañemos, la
partida de la animación se juega hoy en día en internet, cualquiera que tenga
el objetivo de salir en la tele creo
que se está equivocando y apunta a dirección incorrecta."
Situación del sector
en España
"Creo que hay que adecuar los
presupuestos a las necesidades actuales, es decir, reducirlos en un 90% y
tratar de sacar productos que sean viables económicamente, sin importar la
envergadura de los mismos (es decir, si gastas 10 y ganas 15 es mejor que
gastar 2000 y ganar 1500, no sé si me explico). Hay muchas oportunidades ahí
fuera, sobre todo en internet; yo evitaría, por poner un ejemplo, tratar de
obtener un gran presupuesto para un corto/pieza/largo, y en oposición haría lo
posible por rodearme de gente valiosa que quisiera ayudar y entre el colectivo crear una obra
interesante con los medios que haya disponibles."
Influencias
"En música algunos
de mis referentes son Ennio Morricone y
John Williams, creo que éste último es un mago de la música de cine, tiene
ideas brillantes y bien desarrolladas. No creo necesario comentar ninguna de
ellas porque son de sobra conocidas. No puedo, en animación, dejar de mencionar
los primeros trabajos de Disney, algunos
mangas y otros dibujos que echaban por la tele en los 90 en el canal Cartoon
Network...no quiero ponerme nostálgico pero aquello sí que eran buenos
dibujos."
“INSIDIOUS: CHAPTER 2”, LAS BUENAS SECUELAS
By : El día del Espectador
HIMAR
R. AFONSO
Es
bastante frecuente que películas de terror de cierto éxito vean
continuadas sus historias en sagas que, en ocasiones, parecen
interminables. Es posible que esto se deba a los finales clásicos
del género, que dan pie a unos códigos de repetición fácilmente
reconocibles. En el caso de Insidious, el
final permitía una continuidad directa del momento en el que
terminaba, sin necesidad de contar una nueva historia.
![]() |
Las verdades que encierran los villanos de Insidious |
Esto
permite un voto de confianza a la secuela de estos viajes astrales
(primera secuela que el propio James Wan realiza), ya que una
historia independiente tendría todas las probabilidades de contar
nuevamente lo mismo, mientras que con una continuación parece
posible innovar un poco en el argumento. Y en este caso, a pesar
de seguir hablando de los mismos temas (pues el mal no ha acabado),
sí que consigue hilar muy bien el desenlace y servirse de forma útil
del filme anterior, utilizando algo fundamental para la narración:
la sorpresa.
![]() |
Cómo generar terror cuando se traspasa la fábula |
En
este sentido, explora aun más algo que, al parecer, no tuvo
demasiada aceptación en la primera entrega: el mundo de las sombras,
ese mundo entre el Más Allá y el Reino de los Vivos. Aquí
aprovechan las circunstancias de la obra anterior para plantear
las condiciones espacio-temporales de ese universo. Al carecer de
tiempo, se puede acceder a cualquier momento presente, pasado o
futuro del mundo de los vivos, lo cual le sirve a los
protagonistas -o a sus proyecciones astrales birladas de sus
“recipientes”, de sus cuerpos- para encontrar salida y combatir a
esos espíritus que intentan hacer el mal. Lo más interesante de
esta condición atemporal es que no la explican, sino que asumen
el entendimiento por parte del espectador, o por lo menos “le
retan” a comprenderlo; y la mayor fortaleza de explorar este mundo
fantástico (y de tener la valentía de desarrollarlo) es que
convierte al clásico protagonista del relato de terror en un
elemento activo, dispuesto a hacer cosas y a enfrentarse a sus
miedos y a un mundo de tinieblas, no como ocurre con demasiada
frecuencia en el género de terror: que los protagonistas son
pasivos, simplemente huyen de lo inevitable o, dicho de otro modo,
“esperan a la muerte”.
Personalmente,
no me sorprenden las críticas en referencia a ese “universo de los
muertos” que en Insidious se decide mostrar y que en
Insidious: Capítulo 2 se sigue desarrollando. Parece que
al mostrar lo que debemos construir en nuestra fábula, se pierde el
sentido del terror... sin embargo, en este caso y dada la
importancia de este otro universo, diría que es necesario y de
agradecer que propongan un esbozo de lo que sería ese mundo de
incertidumbre e inseguridad, y cómo proyecciones astrales que no
deberían estar allí (pues son seres aún vivos) desestabilizan su
orden natural. Un tema fácilmente traspasable al “mundo vivo”
actual, dicho sea de paso. En este sentido, la puesta en escena resulta determinante en esa transgresión de la fábula en favor de lo tangible, y la articulación del trauma infantil y de los recuerdos como origen del mal, como "sombra del enemigo" personalizado en la madre del villano.
![]() |
El elemento 'geek' insertado en el relato de terror |
Lástima
por ese desafortunado epílogo que reabre una nueva historia
(ahora sí que acudimos a la repetición de códigos) tras finalizar
de forma satisfactoria la iniciada en la primera entrega. Con James
Wan ya fuera de lo que parece ser una nueva saga interminable (como
su inagotable Saw), cabe lamentar esta molesta costumbre de
la industria por alargar en el tiempo lo que bien hubiera podido
terminar, recordándonos que este medio, antes que un arte, sigue
considerándose un negocio de entretenimiento.
Locura, confusión y carcajadas en ¿QUIÉN MATÓ A BAMBI?
By : El día del Espectador
HUGO MUGNAI
Si
hay un género que nos caracteriza culturalmente a los españoles no es otro que
la comedia. Y es que si bien durante años se ha acusado al cine español de
recurrir en demasiadas ocasiones a la Guerra Civil, el humor ha sido
probablemente la fuente de muchas de nuestras historias de forma más o menos
consciente. Y en tiempos como los que
corren, en los que nuestro cine y nuestra sociedad no se encuentran en su mejor
momento, siempre es de agradecer la aparición de una película nacional que destaque
en la cartelera con una visión desenfadada y optimista (aunque sea como puro
entretenimiento).
![]() |
Julián Villagrán y Quim Gutiérrez no saben qué hacer con su jefe |
Quizá
el mayor problema del guión es el desnivel entre ambas tramas; pues la primera
comienza fuerte, arrancando carcajadas desde los primeros minutos y atrapando
al espectador; mientras que a la otra le cuesta carburar, y con unos personajes
algo desdibujados y carentes de interés, puede llegar a verse como una
interrupción algo molesta de la primera. Pero desde el momento en el que ambas
tramas se cruzan, las dos se igualan y encajan perfectamente dentro de la
locura general concluyendo en un final precipitado y algo confuso (como, por
otro lado, no podía ser de otra manera), pero perfectamente válido.
La
pareja Quim Gutiérrez-Julián Villagrán funciona a la perfección, y es que en
unos papeles bastante sencillos, ambos cumplen y logran crear una empatía de lo
más inocente en el público. En la otra trama las interpretaciones quedan desdibujadas, pues los personajes resultan algo endebles. Así, Ernesto
Alterio no termina de cuajar en su rol de macarra
con pocas luces, mientras que Enrico Vecchi logra evolucionar de un secundario
poco interesante hasta lograr convencer en un papel cómico por su "exceso de empatía" con el secuestrado. Mención aparte merecen Clara Lago y Úrsula Corberó, pues sus papeles
resultan de lo más secundario. Y es que el film de Santi Amodeo, probablemente
no pasaría el -cada vez más en boga- Test
de Bechdel, que mide en nivel de paridad entre géneros en las películas,
pues sus personajes femeninos tienen un papel secundario y bastante pasivo.
Quizá
la mayor virtud de ¿Quien mató a Bambi?
es que nos cuenta una historia de enredo y caos que no es nada nueva, es un
relato contado miles de veces de mil maneras diferentes. Y sin embargo,
funciona, gusta y divierte como si fuera la primera vez. No es una obra
maestra, ni una comedia perfecta, eso es evidente; pero es un filme que cumple
con lo que promete con gran solvencia y un humor disparatado. Y eso ya es mucho.
NOTA:
7’5
THE BRIDGE: ¿cruzamos el puente?
By : El día del Espectador
ÁLVARO TEJERO
Ahora
que el frío por fin ha llegado de nuevo a nuestras vidas nada mejor que hablar
de una serie donde el calor juega un papel predominante. No solo por
transcurrir en la frontera estadounidense-mexicana, en concreto en la ciudad de
El Paso, sino por ser una de los estrenos más potentes de la pasada temporada
televisiva de verano.
Entre
los estreno de este año he encontrado muchas decepciones ( el despropósito de
The Following, la falsa trascendencia de Hannibal, la absoluta
falta de espíritu vikingo en Vikings o el fácil desarrollo de Master of Sex tras su prometedor piloto) y algún éxito (la adulta
House of Cards o la absoluta felicidad de cada capítulo de Bunheads). The
Bridge se situaría en el medio. confluyendo en ella una serie de condicionantes
que marcan su visionado de forma irremediable:
Es
una serie de la cadena de cable F/X. Qué significa esto: cierta austeridad
técnica que te recuerda que es estás viendo televisión (algo que no es bueno ni
malo de por sí), problemas en la dirección de actores y una tendencia hacia el
exceso dramático que termina convirtiendo a casi todas sus producciones en
telenovelas o folletines en partes de su trama. Ahí están para corroborarlo
propuestas casi siempre de tono masculino como Prison Break, The Shield,
Nip/Tuck, Lights Out o American Horror Story.
![]() |
Los pareja protagonista original |
Se
trata de una adaptación de la serie escandinava Bron/Broen. La tv
norteamericana tiene últimamente dos lugares de los que extraer idea para su
televisión: Israel y los países escandinavos. Por supuesto, en seguida salieron
las voces de los ofendidos por la capacidad depredadora y la falta de ideas de
la industria estadounidense, sin haber visto ni un capítulo de la serie. Como
pasa siempre.
La
productora ejecutiva y una de las guionistas es Meredith Stiehm, una de las
responsables de la increíble en el mal sentido de la palabra Homeland. Este
dato se enfrentaba a un interesante avance, un prometedor argumento (la
frontera entre USA y Mexico es un lugar que se presta a grandes conflictos) y
una pareja protagonista totalmente cinematográfico. El nominado al Oscar Demián
Bichir y Diane Kruger, cuya absoluta belleza esconde sus capacidades actorales.
![]() |
la belleza clásica de Diane Kruger |
¿Cuál
es el resultado teniendo en cuenta todo lo escrito?
Pues
una serie que se queda a medio camino en todas sus propuestas, que no encuentra
su lugar hasta el capítulo final y que no termina de aprovechar el principal
interés que ofrece el contexto en que se desarrolla. ¿Por qué le sucede esto?
Por seguir la floja e incoherente línea
argumental principal de la original sueca (manos a la cabeza por parte de los
que defienden que lo original es siempre mejor).

Pero
por otra lado en el piloto también se ven las intenciones de un asesino en
serie con aires de denuncia cuyos motivos verdaderos provocaran la risa
involuntaria y a punto están de cargarse toda la serie. Y esos motivos, y ese
asesino están calcados de Bron/Broen. Cuando se alejan de ello para centrarse
en todo lo que ofrece la frontera y los problemas la serie crece. Lo mismo que
le ocurre a su hermana The Killing, que al tomar su propio camino
en su segunda temporada crece hasta convertirse en una de las mejores series de
esta nueva edad de oro televisiva.
![]() |
Imagen que define el conflicto de la serie |
Acompañando
todo el problema central una de cal y otra de arena. Presentación de personajes
interesantes que se olvidan, sobreactuación y excesos melodramáticos; una gran
pareja protagonista (de nuevo personaje femenino con problemas de conducto y
trastornos psíquicos como en Homeland), una conseguida atmósfera asfixiante, o violencia seca.
Puede
parecer que no hay manera de salvar la serie, pero no es así. La línea abierta
en el último capítulo incita a la esperanza, los personajes de Kruger y Bichir
han conseguido una potente química y esconden muchos secretos, y nos encontramos con muchos frentes
abiertos oscuros. Un thriller que no sabe si quiere ser una radiología social. Esperemos que en la segunda temporada opten por cruzar
definitivamente el puente y mancharse las manos definitivamente con el tráfico de drogas, la trata de mujeres o el crimen organizado. Las bases ya las han sentado