Posted by : El día del Espectador agosto 06, 2013

HIMAR R. AFONSO



La última película de Petter Naess se desarrolla en 1940, en plena II Guerra Mundial, a través de las montañas de Noruega y con soldados británicos y alemanes como protagonistas. ¿Qué comparten estos grupos enemigos? Una situación extrema para la cual tendrán que aprender a convivir si quieren sobrevivir.


El calor de la cabaña frente a la temible naturaleza
A pesar de lo evidente del conflicto (algo que el propio Naess reconoce), lo que dota de interés el relato es el saber que está basado en hechos reales. Más allá del desarrollo, pensar en la idea es casi una necesidad: en tiempos de guerra, personas que luchan por matarse deben trabajar juntos para sobrevivir; y a partir de ahí, se trata de ver si es posible que descubran que no son tan diferentes. Más evidente aún que el conflicto, es el final de la historia, por lo que no se plantea una película que busca el final.

Lo que convierte esta película en una obra notable es que, a pesar de todas las evidencias y del final más que pronosticable, nada de eso importa. El relato se centra en el desarrollo de esa incómoda situación, en el “tira y afloja” de los personajes y en los momentos puntuales que les acercan o les alejan, produciendo una evolución lógica pero compleja. Lo real de sus motivaciones es lo que hace frente a lo obvio de la historia. No se está esperando el final, sino los momentos que viven en esa cabaña, en ese paréntesis a la guerra del que, pese a las adversidades, ninguno querría salir.


El paréntesis de la Guerra

Con un juego estético un tanto extraño, afiliado a menudo a la frialdad de los filmes de Zentropa, pero con un fuerte lirismo en otras; mediante unos recursos narrativos generalmente coherentes o rigurosos y, otras veces, rozando el melodrama o el mensaje buenrollista, el director de Elling construye una estructura virtuosa en el circuito de fortalezas y debilidades narrativas (lo obvio frente al foco de interés) y del compromiso estético. Una historia interesante en concepto y en lenguaje, y una película muy recomendable en el abanico de la taquilla actual.

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